En el dinámico escenario laboral actual, la optimización de los recursos humanos se ha convertido en un imperativo para todas las industrias y sectores. Este artículo aborda la esencia de la planificación de la fuerza laboral como un instrumento crucial para mejorar la eficiencia organizativa y la toma de decisiones informadas. Centrándose en el sector de la auditoría, el texto explora la necesidad de maximizar la utilización de expertos, especialmente en un entorno donde la diversidad en habilidades, experiencia y compensación es la norma. La complejidad adicional de gestionar una fuerza laboral envejecida y las demandas cambiantes se abordan como desafíos fundamentales en esta disciplina.
En todos los campos y sectores, es crucial que las organizaciones consideren una planificación adecuada de su fuerza laboral para mejorar la eficiencia y tomar decisiones informadas. El ámbito de la auditoría, al igual que cualquier otra disciplina, debe optimizar la utilización de sus recursos expertos. Enfrentar el desafío de combinar empleados con distintos niveles de habilidades, experiencia y compensación para concluir proyectos puntualmente y con los más altos estándares, al mismo tiempo que se maximiza la rentabilidad, se ha vuelto aún más complejo debido al envejecimiento del personal y la rotación.
Es aquí donde entra en juego la planificación de la fuerza laboral, un proceso diseñado para asegurar que el número adecuado de empleados esté disponible en el lugar correcto, con las habilidades apropiadas y a un costo razonable. El objetivo es igualar la capacidad de la fuerza laboral con las demandas presentes y futuras. Mediante la predicción de la demanda futura de trabajo, las organizaciones pueden detectar las diferencias en sus capacidades y tomar medidas correctivas.
En general, se pueden distinguir dos enfoques en la planificación de la fuerza laboral: la estratégica y la operativa.
Planificación Estratégica:
La planificación estratégica de la fuerza laboral implica desarrollar un plan que oriente a la organización hacia la realización de su visión a largo plazo. Este enfoque proactivo anticipa los futuros requerimientos de personal y busca asegurar que la organización cuente con una fuerza laboral competente para cumplir sus objetivos comerciales. Las líneas de acción incluyen:
- Apoyar la estrategia general de la organización.
- Abordar factores externos que afectan a la fuerza laboral en su totalidad.
- Mantener la capacidad operativa.
- Mitigar riesgos potenciales.
Planificación Operativa:
La planificación operativa, por su parte, se enfoca en las acciones necesarias para lograr las prioridades inmediatas de la empresa. Su objetivo es crear un plan concreto y realista para alcanzar los objetivos comerciales a nivel de unidades operativas. Esto facilita la ejecución eficiente de las actividades diarias. A su vez, complementa el plan estratégico al considerar las necesidades inmediatas de recursos para un horizonte temporal de seis a doce meses.
Llevar a cabo una planificación de la fuerza laboral implica seguir una serie de pasos clave:
- Prever y evaluar la capacidad de la fuerza laboral:
- Identificar recursos requeridos a tiempo completo, parcial, contratistas, etc.
- Considerar la disponibilidad de recursos en uno o dos meses tras la finalización de sus asignaciones actuales.
- Incluir previsiones para nuevos recursos y salidas.
- Asignar horarios y ubicaciones, especialmente si los recursos operan en diferentes zonas horarias.
- Realizar seguimiento de habilidades y competencias.
- Establecer tareas a corto plazo:
- Enumerar proyectos actuales y futuros, incluyendo los internos.
- Considerar proyectos en marcha con alta probabilidad de finalización.
- Incluir actividades no directamente relacionadas con proyectos, como mantenimiento, administración y capacitación.
- Categorizar proyectos según su facturación, estrategia y naturaleza.
2. Comparar la demanda laboral con la capacidad actual:
- Analizar la capacidad de recursos frente a las demandas laborales.
- Identificar las discrepancias y brechas en recursos.
- Identificar excesos o carencias de habilidades.
- Diseñar un plan para cerrar la brecha.
3. Diseñar un marco para excesos o carencias:
- En caso de carencias, determinar si se necesitan recursos a tiempo completo o contratados, considerando la duración de las asignaciones.
- Para excesos, redistribuir recursos para acelerar proyectos existentes o reactivar proyectos archivados.
- Explorar nuevas oportunidades basadas en las habilidades disponibles.
- Asignar recursos adecuados a proyectos identificados.
En el mercado existen diversas soluciones de planificación de recursos empresariales que automatizan la recopilación y el análisis de datos para optimizar la asignación de empleados a proyectos. No obstante, es probable que los equipos de planificación de la fuerza laboral deban realizar ciertas tareas manuales en colaboración con los departamentos de recursos humanos, finanzas y gestión. Estos sistemas suelen ser genéricos y pueden requerir ajustes específicos para el ámbito de la auditoría, con el objetivo de construir equipos eficaces para brindar los servicios demandados por los clientes.
En conclusion, en una época donde la agilidad y la eficiencia son esenciales, la planificación de la fuerza laboral emerge como un faro guía para el éxito en la industria de la auditoría y más allá. Este artículo ha destacado cómo tanto la planificación estratégica como la operativa son cruciales para enfrentar la complejidad de gestionar recursos con diversas habilidades y expectativas.