Una táctica efectiva consiste en establecer una noción clara de lo que implica tener una vida equilibrada. Habitualmente, se busca una vida exitosa desde el punto de vista financiero y profesional. No obstante, muchos dueños y socios de empresas quedan atrapados en un ciclo perpetuo de búsqueda constante de más: más ingresos, mayor crecimiento, mayores oportunidades. No obstante, es crucial cuestionarse si eso es realmente lo que se anhela. Para lograr un equilibrio, es esencial determinar cuánto es verdaderamente necesario para alcanzar la felicidad y cómo se desea emplear el tiempo. Es apropiado indagar en:
- Los deseos personales en cuanto a la utilización del tiempo.
- Las metas financieras.
- La cantidad de horas de trabajo deseada.
- Las áreas en las que se pretende concentrar el tiempo.
Responder a estas interrogantes facilitará la exploración de las aspiraciones y la planificación para alcanzarlas.
Reconocer los obstáculos
Resulta imperativo identificar los obstáculos que entorpecen la consecución de un equilibrio en la vida. Estas “barreras” para el equilibrio suelen ser limitaciones autoimpuestas, las cuales justifican la imposibilidad de perseguir los objetivos de armonía entre el trabajo y la vida personal. Es necesario plantearse:
- ¿Cuáles son los impedimentos para el equilibrio?
- ¿Existe temor al cambio?
- ¿Se busca el crecimiento simplemente porque es lo esperado?
- ¿Se está viviendo en función de expectativas ajenas o de la sociedad?
Identificar estos obstáculos requiere una autoevaluación honesta. Una vez comprendidos, es posible tomar medidas para superarlos.
Incorporar el equilibrio a la cultura empresarial
Si se busca una mayor armonía en la vida, es esencial que el equilibrio forme parte integral de la cultura de la empresa. Cuando esta prioridad es compartida por todos, resulta mucho más sencillo convertirla en una meta personal. Finalmente, como propietarios o socios de empresas, se tiene la responsabilidad de ejemplificar comportamientos para el equipo.
Un equilibrio mejorado entre la vida laboral y personal se traduce en un equipo más feliz y productivo. El desafío consiste en internalizar esta armonía en la cultura corporativa. Para lograrlo, se pueden implementar acciones tales como:
- Mantener a los miembros del equipo dentro de límites razonables de trabajo, incluso durante temporadas de alta demanda.
- Fomentar la toma de vacaciones y el aprovechamiento del tiempo libre personal por parte del equipo.
- Garantizar que los directivos cuenten con tiempo para capacitar a los empleados.
- Comprender la definición de equilibrio entre el trabajo y la vida para el equipo, y trabajar en la creación de ese entorno.
- Flexibilidad en los horarios de trabajo.
- Evitar forzar a los empleados a elegir entre el trabajo y la familia.
Reconociendo lo que el equipo valora, es posible incorporar la noción de equilibrio como parte esencial de la cultura.
Modificar la perspectiva
Numerosos dueños o socios de empresas sienten culpa al priorizar el equilibrio entre el trabajo y la vida. Para muchos, tomarse un descanso o alterar las prioridades parece egoísta e irresponsable. No obstante, no debe existir remordimiento al disfrutar del tiempo de ocio, en lugar de sentir que se debería estar realizando actividades más productivas. Es necesario cambiar la perspectiva y adoptar un enfoque diferente hacia la idea de llevar una vida equilibrada. Esto se convierte en una inversión en la salud, felicidad y futuro de la empresa.
Planificación de la capacidad
La planificación de la capacidad emerge como una herramienta eficaz para prevenir la sobrecarga laboral. Al conocer con precisión la cantidad de trabajo que una empresa puede manejar, es posible priorizar y evitar asumir compromisos excesivos. En consonancia con esta planificación, se debe asegurar la contratación del personal necesario para evitar sobrecargar tanto a los trabajadores actuales como a los propios dueños o socios.
Aprender a decir “No” y priorizar las tareas
Para instaurar equilibrio en la vida, es esencial aprender a decir “no” y centrarse en las labores que se disfrutan. Se debe aceptar únicamente a aquellos clientes que sean apropiados para la firma y con los cuales se trabaje con agrado. Es fundamental recordar que, para los dueños o socios, la empresa es suya y, por ende, tienen el control sobre sus actividades. No es necesario aceptar cada cliente potencial ni abordar cada proyecto que se presente.
Abrazar un pasatiempo
Si bien el trabajo es una parte integral de la vida, no es la única faceta. Para lograr mayor equilibrio y satisfacción, resulta importante adoptar un pasatiempo. Ya sea practicar deportes, dedicarse a la jardinería, la pintura, la lectura u otra actividad placentera. La participación en pasatiempos puede reducir el estrés, mejorar las conexiones sociales y aumentar la felicidad.
Fomentar mayor equilibrio en la vida brinda la posibilidad de tomar las riendas del futuro y la felicidad. Como auditores, dueños o socios de empresas, se ostenta el poder de crear la vida y el negocio ideales. Solo es cuestión de explorar lo que esta búsqueda conlleva.