Los efectos del teletrabajo en los profesionales de auditoría.

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En respuesta a la reciente globalidad de la pandemia, se ha observado un marcado incremento en la adopción del trabajo a distancia en diversas actividades y campos profesionales. Aunque la auditoría ya había incorporado en cierta medida el concepto de trabajo remoto debido a la necesidad de que los auditores estuvieran en las instalaciones de los clientes o en locaciones externas a la oficina, esta transición ha traído consigo tanto efectos positivos como negativos, especialmente para los auditores jóvenes. Aquellos que estaban al comienzo de sus carreras tuvieron que enfrentar un aprendizaje abrupto y la construcción de relaciones que anteriormente se desarrollaban a través de interacciones cara a cara con los integrantes del equipo de auditoría y los clientes.

¿Cuáles son los aspectos más notables generados por el trabajo remoto?

Dentro de los cambios más notables generados por el trabajo remoto, se encuentran los siguientes aspectos:

  • Transformación en los procedimientos de auditoría: Los auditores en la actualidad deben desempeñar la mayor parte de sus labores de manera remota, empleando herramientas digitales para recolectar y analizar información. Además, deben modificar sus enfoques para llevar a cabo entrevistas y reuniones de forma virtual.
  • Mayor dependencia en la tecnología: Esto conlleva a que los auditores deben estar versados en múltiples herramientas digitales y tecnologías para eficientemente recopilar y evaluar datos. Asimismo, es crucial que los auditores estén al tanto de las tendencias y novedades tecnológicas para poder adaptarse a los cambios en su entorno laboral.
  • Aumento en la flexibilidad y eficacia: El trabajo a distancia ha brindado a los auditores la oportunidad de gestionar su tiempo de manera más flexible, potencialmente mejorando su eficiencia. Los profesionales pueden desempeñarse desde cualquier lugar y en cualquier momento, permitiéndoles ajustar sus horarios según las necesidades de los clientes.
  • Desafíos incrementados en la comunicación: La comunicación puede ser un reto en el ámbito remoto, particularmente para los auditores que necesitan colaborar con múltiples partes involucradas en el proceso de auditoría. Garantizar una comunicación nítida y efectiva con los clientes y otros colegas se vuelve esencial para cumplir con los objetivos de la auditoría.

Por otro lado, se pueden identificar los siguientes efectos negativos predominantes:

  • Escasez de interacción y comunicación: La ausencia de interacción presencial y de comunicación en tiempo real puede dificultar la colaboración entre los miembros del equipo, limitando el intercambio de ideas y conocimientos.
  • Dificultades de acceso y seguridad de datos: El trabajo a distancia aumenta el riesgo de vulnerabilidades en la seguridad de datos, como pérdida de información confidencial o exposición a amenazas cibernéticas. Además, puede haber obstáculos en el acceso a sistemas y herramientas necesarios para realizar las tareas de auditoría.
  • Desafíos en supervisión y revisión de labores: Supervisar y revisar el trabajo del equipo se vuelve más complejo en un entorno remoto, lo cual podría aumentar la posibilidad de errores o falta de calidad en las tareas ejecutadas.
  • Dificultades en construcción y mantenimiento de relaciones con clientes: El trabajo remoto puede complicar la forja y sostenimiento de relaciones con los clientes, afectando tanto la calidad de la auditoría como la satisfacción del cliente.
  • Equilibrio entre vida laboral y personal comprometido: El trabajo a distancia puede contribuir a problemas en el balance entre vida personal y laboral, impactando la salud y bienestar de los profesionales y su capacidad para cumplir con sus responsabilidades.

En vista de lo mencionado, la realidad actual refleja que el trabajo a distancia perdurará en alguna medida. Algunas empresas, tras varios meses de pandemia, ofrecen a los auditores más jóvenes la opción de trabajar parcialmente desde casa. Estas circunstancias presentan múltiples desafíos que deben ser afrontados para lograr resultados satisfactorios. Los desafíos primordiales son:

  • Sentimiento de desconexión: Los auditores jóvenes pueden sentirse desconectados del equipo, la firma y los clientes al ejecutar su labor de manera aislada. Esto puede afectar su proceso de aprendizaje y desarrollo profesional. En un entorno remoto, los colegas no pueden determinar cuándo los supervisores están disponibles o regresan de interacciones con los clientes, momentos cruciales para plantear preguntas y disminuir la curva de aprendizaje.
  • Calidad del entrenamiento: La disminución de interacciones entre auditores experimentados y jóvenes puede resultar en un entrenamiento de menor calidad para estos últimos. La retroalimentación puede ser demorada y es complejo discernir cuándo intervenir y plantear inquietudes sobre el estado laboral. La reducción de encuentros presenciales dificulta el aprendizaje y las oportunidades de orientación por parte de los expertos.
  • Déficit en habilidades interpersonales: La práctica de habilidades blandas, tanto con colegas como con clientes, puede requerir más tiempo para desarrollarse en un entorno remoto. Como resultado, los jóvenes auditores pueden enfrentar dificultades al liderar compromisos o comunicarse con sus clientes.
  • Menor efectividad en supervisión: En un entorno remoto, es más complicado determinar si los miembros del equipo están desempeñándose de manera efectiva o son improductivos. La falta de interacción, la limitación en las oportunidades de preguntas y la demora en obtener respuestas obstaculizan la supervisión.

Es altamente probable que diversos profesionales, incluyendo a los auditores, adopten un enfoque laboral híbrido en el futuro. La pandemia reciente provocó transformaciones sustanciales en el mundo laboral, y estas transformaciones parecen mantenerse en la actualidad. Las empresas tienen la responsabilidad de abordar los retos que surgen con estos cambios.

En conclusion, es esencial saber adaptarse tanto a los entornos presenciales como remotos. En situaciones de trabajo en persona, se debe promover deliberadamente la construcción de relaciones dentro del equipo de auditoría y con los clientes. Buscar oportunidades para interactuar, como almuerzos o cenas en equipo con los clientes, puede contribuir a recuperar parte del tiempo perdido en la construcción de relaciones en el contexto híbrido. En el trabajo a distancia, es importante tener en cuenta el ritmo de productividad de los demás. Planificar momentos de contacto a mediodía o al final del día a través de videoconferencias puede garantizar la identificación y resolución rápida de problemas. En última instancia, se debe explorar las alternativas más efectivas para lograr un trabajo productivo y eficiente que beneficie a todas las partes involucradas.

Ecovis Honduras

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