Las empresas de auditoría a menudo se enfrentan a un desafío crucial que afecta la ejecución de sus compromisos: la retención de su personal. En ocasiones, las deserciones de personal podrían atribuirse a enfoques administrativos obsoletos. La rotación constante de personal restringe el progreso de la empresa y complica la planificación de su sucesión. A pesar de que esta situación tiene múltiples causas, muchas de ellas están bajo control. A continuación, se presentan varias estrategias para mejorar la retención del equipo de empleados:
Invertir en formación y orientación:
La capacitación y mentoría deben ser prioridades. Aunque se afirma que el personal es tan importante como los clientes, rara vez se refleja en la práctica. Uno de los motivos de la deserción es la falta de oportunidades de aprendizaje y avance. Por tanto, es fundamental adoptar un enfoque innovador y continuo en la capacitación y desarrollo de liderazgo. También, se debe examinar la relación entre la compensación de los socios y gerentes y su capacidad para guiar a su personal.
Presentar desafíos laborales:
Los líderes de los equipos de auditoría deben convertir el trabajo en un desafío emocionante para los auditores, de modo que lo aborden con entusiasmo. Para lograrlo, se pueden emplear recursos como la tecnología, subcontratación y la colaboración con expertos para estimular la creatividad. Reducir tareas monótonas y repeticiones es esencial. Además, es crucial adoptar avances como el uso de aplicaciones en la nube, auditorías continuas y análisis de datos. El personal espera automatización en la investigación y contenido fácilmente comunicable a los clientes. Implicar al personal, brindarles oportunidades desafiantes y delegar ciertas responsabilidades son pasos importantes.
Flexibilizar el trabajo:
Los auditores deben ser tratados como los profesionales que son. Los empleados modernos buscan mayor flexibilidad laboral, como el concepto de “trabajo en cualquier lugar, en cualquier momento”. Si se cumplen los objetivos de productividad y se brinda un excelente servicio al cliente, se pueden acordar diferentes modalidades de trabajo. Esto es especialmente relevante en épocas de alta carga laboral, como la temporada de impuestos o cierres de ejercicio. Las firmas pueden aliviar la presión durante estas fases mediante horarios flexibles, trabajo remoto y subcontratación.
Proporcionar retroalimentación constante:
La retroalimentación regular tiene más valor que las evaluaciones anuales tradicionales. Los líderes y auditores obtienen más beneficios de un feedback constante, que permite corregir problemas de manera inmediata y evitar errores que afecten a los clientes.
Ser transparente en las oportunidades:
Es fundamental mostrar a los empleados las posibilidades reales de ascenso y remuneración. La duración de tiempo necesaria para alcanzar la posición de socio puede desmotivar a profesionales talentosos. Agilizar los procesos internos y brindar claridad puede reducir esta demora significativamente. Si los empleados comprenden las recompensas financieras potenciales y entienden cómo opera la empresa, se sentirán más involucrados y motivados.
En situaciones donde la empresa enfrenta una escasez prolongada de personal, se deben abordar estrategias adecuadas. La falta de personal no debe agotar los recursos de la firma. Cuando un miembro del equipo se ausenta, la firma debe adaptarse y continuar operando de manera eficiente. La comunicación clara y la redistribución de tareas son esenciales. La flexibilidad y el trabajo en equipo son cruciales para mantener la ejecución de los compromisos sin problemas.
Para concluir, destacamos la importancia de tener una estrategia y visión claras. Los empleados quieren trabajar para una empresa que avance y no se estanque. Mantener una actitud positiva y fomentar la participación del equipo en la mejora y crecimiento de la empresa beneficia a todos los involucrados.