Un programa de auditoría representa un documento que estructura de manera coherente y organizada los pasos que serán llevados a cabo en una auditoría, junto con la extensión y el momento en que serán aplicados. Su finalidad radica en proporcionar una guía durante la realización del trabajo y en constituir un registro constante de las labores efectuadas.
La actividad de auditoría se realiza a través de la implementación de programas de auditoría. Estos programas son esquemas detallados previamente diseñados para el trabajo en cuestión y contienen objetivos y procedimientos que dirigen el curso de la acción.
La creación del programa de auditoría demanda una planificación y elaboración anticipada. El contenido del mismo debe ser adaptable, claro y conciso, de modo que los procedimientos empleados en cada auditoría se adapten a las circunstancias específicas del examen. Cada auditoría requiere un programa confeccionado a la medida, ya que las condiciones de trabajo varían entre diferentes proyectos.
Al desarrollar un programa de auditoría, es imperativo considerar:
- Las pautas de auditoría.
- Las técnicas y procedimientos de auditoría.
- Las leyes actuales y pertinentes al cliente.
- Experiencias pasadas.
- El conocimiento acumulado sobre el cliente.
- Lecciones aprendidas de terceros.
Es esencial revisar el programa de auditoría de forma periódica, en función de los cambios en la legislación, las condiciones particulares del cliente, las operaciones en curso y los principios, estándares y métodos de auditoría.